descanso...

-Woo un momento!-

Dijo, los había estado sigueindo desde el principio, en silencio.

-Jovencito del Kimono podría presentarse? preguntó, ya que al menos para ella era un desconocido, aunque aparentemente era algún amigo de Rebeca-

Luego se acercó a Loki, que parecía algo impaciente, lo cual entendía bien, había perdido a un ser querido y debía sentirse angustiado.

David: otro proposito? (decia entrometiendose en la conversacion)

David: No me digas que tambien haz venido como todos los demas a buscar ese supuesto tesoro (Refunfuñaba sin perder la vista en genesis)

David: como se lo he dicho a los demas es una perdida de tiempo, aqui no hay tal tesoro, solo perderas la vida como los demas ( apartando su mirada para fijarse en donde estaba el pequeño loki)

Había escuchado la conversación, aún de brazos cruzados, cuando cierta palabra llamó su atención:

-Mucho gusto, ¿tesoro? uh?-

Luego se rascó un poco la cabeza.

-Entonces, la mayoría, está aqui por un tesoro?-

Preguntaba mientras miraba a Nassau, a Loki, a Rebecca y al recién llegado Génesis, que tenía un aspecto mas de espiritista-médium, mezclado con facha de artista perdido camino a un concierto, que de cazatesoros.

David: Eres bueno fingiendo (lo miraba insistente)
David: y si, hay un supuesto tesoro en este lugar, y no, yo no estoy aqui por el. (dice en posicion de contador de historias xD)

David: hace unos cuantos años arribo un aristocrata muy rico en esta aldea, se dice que trajo consigo una ofrenda para los dioses.
por lo que la historia cuenta que en esta aldea solo amanecia durante 2 horas al dia, asi que este sujeto penso que seria un castigo de los dioses asi que dijo que el tenia la solucion, hacer una ofrenda cada año.
las personas estaban conmovidas por lo que este aristocrata queria hacer por ellos, por lo que no retrocedieron a sus exigencias.
pero al parecer algo salio mal... y aquel aristocrata los uso para hacerse con un poder mayor que el perdon de los dioses.
(silencio total)

David: Asi que porfavor, no intenten buscar aquel tesoro, las personas que han intentado llegar hasta el, nunca vuelven, creo que, detras de esto, hay un poder mas alla de nuestra imaginacion.
No quiero, No quiero que se arriesguen

-Ni yo tampoco, digo, que no quiero que se arriesguen y ponerme en peligro tambièn, solo por un tonto cuento de tesoros-
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Dijo con un brillito en los ojos, muy fugaz, porque desapareciò en un parpadeo.

-Ejem, creo que ire por ahì a ver si hay no hay peligro ¿quien viene conmigo?-

Preguntò dirigièndose a uno de tantos corredores de esa enorma mansiòn en la que estaban, todo estaba en un silencio absoluto, las voces de ellos se escuchaban sin hacer eco, ni nada, lo cual le parecìa muy extraño.

de entre las sombras la joven pudo divisar una mancha oscura la cual al momento de verla echo a correr perdiendose de vista,solamente el sonido de cuatro pequeños golpeteos era lo que le podria dar una indicasion de hacia donde se dirigio lo que fuera alla visto.



off: perdon por tanto tiempo es que eh tenido problemas,si me dejan puedo entrar y si no pues ya vere en que lugar entrare nuevamente x3

-Uh?-

Dijo, al tiempo que escuchaba ese ruido, que le distrajo, miró al grupo y salió en dirección de ese sonido misterioso.

-Cuatro, yottsu, uno dos tres cuatro-

contaba en voz baja, hasta susurrar casi ese numero, cada uno correspondía a uno de los sonidos que distinguía.

"Te escucho, pero, que eres y sobre todo ¿donde estas?"

Pensaba mientras caminaba internándose en la obscuridad del pasillo largo de esa enorme mansión.